Un europeo le dice a un cubano:
- ¿Qué, cómo andan en Cuba?.
- Mira chico, no nos podemos quejar.
- Ah!. Ni bien ni mal, ¿no?.
- ¡No, no!. ¡Que no nos podemos quejar!.

Estaba Kirchner y le dice a todos sus habitantes:
- Ciudadanos, les tengo una buena y mala noticia.
¿Cuál es la buena?
- Que la deuda con el fondo buitre han sido saldada.
¿Y la mala?
- Que tenemos 72 horas para abandonar el país.

Persona Experimentada

Un viaje desde la Argentina al Canadá es largo y puede ser aburrido, sobre todo si es durante el invierno canadiense. Nadie viaje al norte. Pedro tenía que viajar y no tenía más alternativa. La primera escala desde Buenos Aires era Santiago, Chile.
Todo normal ya que era bastante atractivo poder ver la imponente cordillera desde el avión. Pero el tramo Santiago a Lima, Perú ya es más largo y Pedro entra a aburrirse.
Mira hacia adelante, hacia atrás, al lado y no hay nadie con quien entablar una conversación que haga más ameno el viaje. De pronto se da cuenta que en la fila opuesta a él hay un señor mirando por la ventanilla de la izquierda. Pedro aprovecha que la azafata pasa ofreciendo tragos y trata de entablar una conversación:
"Disculpe, amigo, ¿le puedo ofrecer un trago?"
"No. Tomé una vez. No me gustó. !No lo hago nunca más!"
Pedro se hundió en su asiento. Al rato pasa la azafata de vuelta ofreciendo bebidas gaseosas y Pedro vuelve a su cometido: "Disculpe, amigo, ¿le puedo ofrecer una gaseosa?"
"No. Tomé una vez. No me gustó. No lo hago nunca más!"
En aquellos años la gente podía aun fumar en los aviones, no existían sectores separados. Pedro saca un cigarrillo y pregunta:
"Disculpe una vez más amigo, ¿le puedo ofrecer un cigarrillo?"
"No. Fumé una vez. No me gustó. No lo hago nunca más!"
A esta altura Pedro se está impacientando con el tipo. De pronto recuerda que tiene un ajedrez magnético. Coloca cuidadosamente las piezas y grita:
"Disculpe mi amigo, ¿pero juega usted ajedrez?"
"No. Jugué una vez. No me gustó. No lo hago nunca más, pero mi hijo, el que está allá enfrente, él juega ajedrez!"
Y Pedro responde:
"Hijo único, NO????"

LOS 5 SECRETOS DE UNA MUJER FELIZ

1. Es importante encontrar a un hombre que comparta contigo la responsabilidad y las tareas del hogar y que tenga un buen trabajo.

2. Es importante encontrar a un hombre alegre, que disfrute el baile, los paseos y que te haga reír.

3. Es importante encontrar a un hombre tierno de quien se pueda depender afectivamente sin que por ello te subordine y además, que no mienta.

4. Es importante encontrar a un hombre que sea buen amante y que adore tener sexo contigo.

5. Es muy, pero muy muy importante, que estos 4 hombres no se conozcan entre sí.

Era una vez un borracho entra a una vecindad y empiesa a gritar:
-Ramera cabrona sal ya.
Despues de unos minutos vuelve a gritar:
-Ramera cabrona abreme.
La señora sale y le dice:
-¡Cuntas veces te e dicho que no me llamo ramera cabrona si no Ramona Cabrera!.

- A ver cuénteme su versión de los hechos -dice el juez.
- Verá, estaba yo en la cocina con el cuchillo de cortar jamón. En esto que entra mi mujer, tropieza, cae sobre el cuchillo y se lo clava en el pecho.
- Ya -dice el juez- siga...
- Pues así, hasta siete veces.

Era un ladrón que quería robar en una casa y de pronto escucha:
- ''Jesús te está mirando'' y otra vez ''Jesús te está mirando''
Y luego ve que es un perico y le dice:
- ¿cómo te llamas?

Y le contesta el loro:
- "Moisés"

-¿"moisés”? ja-ja-ja se ríe ¿y qué tonto te puso así?

  Y le contesta:
- El mismo tonto que le puso Jesús al Doberman que esta detrás de ti ¡idiota!

Viajero Ignorante

Un hombre que tiene mucho dinero decide dedicarse a viajar por el mundo, y como primer viaje se va al Hungría. Cuando vuelve se encuentra con una amigo:
- ¿Qué tal tu viaje por Hungria?.
- Pues todo muy bonito.
- ¿Y Budapest?.
- Una ciudad preciosa.
- ¿Y qué tal con las magiares?.
- Pues... esto... eh, bien.
Cuando se despide se va a su casa, coge el diccionario y busca la palabra "magiares", y lee: "mujeres naturales de Hungría", así que piensa: "vaya, he debido de quedar en ridículo".
Total, que su siguiente viaje es a Portugal, y a su regreso se vuelve a encontrar con su amigo.
- Hombre, me dijeron que te fuiste a Portugal.
- Pues sí, tenía ganas de ver ese país.
- ¿Y cómo es Lisboa?.
- Una ciudad preciosa, su puerto, la zona monumental...
- Bueno, ¿y cómo eran las lusas?.
- Eh... hombre, dentro de su entorno, bien.
Al llegar a su casa coge el diccionario para buscar la palabra "lusas": "mujeres naturales de Portugal", y dice: "vaya, he vuelto a hacer el ridículo, pero en la próxima no fallo".
Como siguiente destino se va a Egipto y a su vuelta, se encuentra de nuevo con su amigo.
- ¿Dónde estabas esta vez?.
- Me fui a Egipto.
- ¿Qué tal las gentes de allí?.
- Amables, pero te intentan sacar el dinero vendiendo baratijas.
- Vaya. ¿Y qué tal las pirámides?.
- Pues me ligué a tres y a dos me las llevé a la cama.

Algunas personas nos preguntan el secreto de nuestro largo matrimonio. Nos reservamos tiempo para ir a un restaurante dos veces por semana. Luz de velas, cena, música suave y baile.

Ella va los jueves y yo los viernes

Se encontraron Sharon y Arafat para discutir sobre el acuerdo de paz para Medio Oriente. Arafat le indica a Sharon que esa tierra ha sido de ellos históricamente y por eso los israelíes se tienen que ir.
Sharon le cuenta esta historia: Hace como cinco mil años, Moisés estaba vagando por el desierto, en este mismo lugar en donde hoy estamos nosotros, para salir de Egipto rumbo a la tierra prometida.
En el desierto no había agua. Moisés hacía como 5 años que no se bañaba, cuando vio a lo lejos un oasis.
Corrió hacia él, se sacó toda la ropa y se tiró al agua.
Después de un largo rato decidió salir y descubrió que le habían robado la ropa; vio a un hombre que pasaba y le grito: - "Eh, usted, ¿no sabe quien me robó la ropa?".
- "Fue un palestino que salió corriendo", le dijo el hombre.
- "Un momentito", lo interrumpió Arafat, -"¡En esa  época los palestinos no estábamos acá!".
- "Bueno", respondió Sharon, - "ahora que dejamos ese punto en claro podemos empezar a negociar"